La familia la entendemos como el grupo de referencia que tiene la obligación de garantizar un desarrollo óptimo del neonato. Si bien se parte de la idea de que incluye o requiere de lazos consanguíneos, desde el punto de vista de la educación, los vínculos afectivos son los determinantes para cumplir su función de socialización y crianza. El respeto de todos sus miembros y el amor incondicional son requisitos necesarios para identificarse como familia.
Actualmente, la diversidad de familias con las que nos encontramos nos obliga a fijar los principios de amor y respeto por encima, si es necesario, de los vínculos legales-administrativos o consanguíneos. De esta forma, se entiende que la unión de las familias no se puede dar por defecto en matrimonios constituidos, así como tampoco se debe pensar que hay desestructuración familiar en casos de divorcio o separación.
Entendemos que la familia es el pilar de la sociedad, por lo que todo aquello que ponga en peligro su bien o su estabilidad tendría que ser llevado a un cuestionamiento profundo. Si la familia enferma, la sociedad se tambalea.
Autora: Patricia Ruiz Perea |
La familia ha sido, es y será el escenario natural en el cual se desarrolla el ser humano, por ello, el derecho brinda protección a la institución familiar, habiendo creado -incluso- una rama del mismo, la cual se ocupa de estos temas y que se denomina “Derecho de Familia”.Los instrumentos internacionales como la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, entre otros, reconocen el rol fundamental de la familia y la necesidad de protegerla. A nivel nacional, la mayoría de Constituciones de los países establecen que la familia es primordial para la sociedad, siendo así, se estípula la necesidad de ser tutelada por el estado.
Al abordar el tema de familia en el programa queremos invitar a reflexionar sobre ella, sabemos que aunque existan normas que la protegen las familias nunca serán mejor custodiadas que por nosotras(os) mismas(os). Al ser conscientes del privilegio y de la responsabilidad que significa pertenecer a una familia estaremos en mejor condición para construir desde el rol que nos toca. Hacer familia no es fácil… presenta muchos retos; pero sin duda es la mejor tarea y ¡la más gratificante de todas!